Pasado NO Pisado: Capítulo 9

Xx: ¿Te quedó todo claro, no?

Xxx: Si.

Xx: Espero que no haya más “sorpresas” como la de los mellizos que interfieran en nuestro nuevo plan.

Alexia: No sé, siento una conexión especial con ellos.. Además, son dos pendejos que merecen ser felices con sus hijos, sin que nadie los moleste. No entiendo como alguien puede hacer una cosa así.

Cris: Pero si todavía no sabés para que quería esa información. Capaz que lo que quiere es darles una sorpresa.

Alexia: Ya te dije que tengo un mal presentimiento, además, para dar una sorpresa no hace falta amenazar y menos con una persona.

Cris: Tenés razón.

Alexia: Me da miedo que les pase lo mismo que nos pasó a nosotros con Sol… - Dijo con algunas lágrimas presentes. - Solo de pensarlo ya me pone mal. No le deseo eso a nadie.

Cris: Ya sé, yo tampoco le deseo eso a nadie pero ellos van a estar bien, vas a ver. - Dijo con el fin de tranquilizar a Alexia.

Alexia: ¿Y si no es así? No me lo perdonaría jamás… Yo sé lo que es que te quiten a tu bebé, vos también lo sabés, sabés todo lo que eso significó para nosotros, para Camila… y se le pasa a ellos no me lo perdonaría jamás, sería todo mi culpa como siempre.

Cris: Lo que pasó con Sol no fue tu culpa, ni mía, y te aseguro que la vamos a encontrar, esté donde esté. Y esta hermosa pareja que describís vos va a disfrutar de sus hijos desde el principio. No vamos a permitir que les pase nada, te lo prometo.

Alexia: ¿Vas a cumplir con tu promesa?

Cris: ¿Alguna vez no la cumplí?

Alexia: No.

Cris: ¿Entonces?

Alexia: Gracias. - Se abrazaron. - ¿Te podés quedar con Cami vos por unos días? Me parece que estará más segura con vos… Gracias, me hizo muy bien hablar con vos.- Se despidió de Cris y se fue.

Seis meses y medio de embarazo, mi panza cada día estaba más grande, y mi bebé a veces se hacía notar mediante pataditas. En el colegio ya todos estan acostumbrados a mi panzita, aunque siguen desviando la mirada hacía mí siempre que pasaba. En mi casa ya todos lo habían aceptado por completo, y estaban más que felices y ansiosos con la llegada del bebé, al igual que en la de Peter y nuestros amigos. Y Peter y yo cada día más unidos y felices, además de ansiosos y nerviosos. Peter todo el día encima de mi preocupándose que no necesite nada. Hacía unas semanas habíamos ido a hacer la ecografía del sexto mes con la esperanza de poder ver el sexo de nuestro bebé, pero, no se dejaba ver. Por lo que con Peter decidimos que iba a ser sorpresa hasta el día del parto.

Nos habíamos “escapado” un fin de semana para estar los dos solos. No muy lejos por el embarazo, pero tampoco muy cerca.

Peter: ¿Qué le dijiste a tus papás para qué te dejaran venir?

Lali: A mi mamá le dije la verdad, que quería pasar un tiempo a solas con vos. Total, ya estoy embarazada. - Me reí. -  Y vos sabés como es, no dijo nada.

Peter: ¿Y a tu papá? - Dijo algo asustado.

Lali: ¿Le tenés miedo Lanzani?

Peter: Ni ahí. - Le miré obvia. - Bueno, un poquito sí.

Lali: Nah, no podés. - Me reí. - Igual, ya me dejaste embarazada, si aceptó eso, me parece que aceptaría cualquier cosa sin matarte.

Peter: No estoy tan seguro de eso.

Lali: ¿Por qué?

Peter: Porque seguís siendo su única nena.

Estuvimos un rato más hablando y nos fuimos a dormir, pero a media noche, más o menos, sentí un dolor en la panza. Al principio no le hice mucho caso, pero los minutos pasaban y el dolor aumentaba. Intenté probar un rato más dormirme pero el dolor, prácticamente, me consumía.

Lali: Peter. - Dije sacudiendolo. - No doy más, despertate, por favor.

Peter: ¿Qué pasa? - Dijo refregándose los ojos.

Lali: Me duele, Peter, no doy más, llevame al hospital, por favor. - Dije con una mano en mi panza.

Peter: Tranquila, chiquita.

Peter se cambió de ropa, al igual que, como pude, yo y nos fuimos al hospital. Él quería llevarme al más cercano que había ahí, pero yo quería que me revisara mi doctora: Alexia.

Peter: Ya llegamos, quedate tranquila, respirá.

Lali: No doy más, Peter, me duele…

Cinco minutos después ya estábamos adentro de la consulta, y a pesar de ser media noche Alexia nos pudo atender. Estaba pasandome el ecógrafo por la panza para comprobar que todo iba bien.

Peter: Está todo bien, ¿no doctora?

Alexia: Chicos, yo.. - se le notaba nerviosa.

Lali: Mi bebé, ¿está bien?

Alexia: Sí. - Dijo, aunque no sonó muy convincente. - Está todo bien, pero te tenés que cuidar Lali, reposo ABSOLUTO. - Dijo remarcando la última palabra.

Lali: Lo veo algo dificil eso con el colegio.

Alexia: Durante lo que queda de mes no vas más, después antes del séptimo mes hacemos otra eco y vemos que hacés con los demás. Por el momento pedís tarea y todo, y como mucho vas cuando tengas examen y solo a esa hora.

Peter: Yo me encargo, quedate tranquila, gracias.

Alexia: Igual, Lali, por las dudas, esta noche te quedás acá, y depende de como evoluciones mañana también.

Lali: ¿Es necesario?

Peter: Sí, y no se habla más.

Alexia: Soy una basura. - Dijo entrando al despacho de Cris.

Cris: Qué decís, ¿por qué?

Alexia: Lali…

Cris: ¿Qué pasó? ¿Te volvió a amenazar ese tipo?

Alexia: Lali, corre el riesgo de perder a uno de sus bebés… Tiene pocas probabilidades si se cuida, pero sé como es y no puede quedarse quieta.

Cris: Vos no tenés la culpa.

Alexia: Si que la tengo por que tampoco puedo decirle porque tiene esos dolores tan fuertes de panza, tengo que decirle que todo está bien, pero que se cuide. Por suerte esta vez ese tipo no sabía que venían como las otras. La dejé ingresada a Lali, por lo menos unos días la mantendré en calma.

Cris: Todo va a estar bien, quedate tranquila.

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Ayer no pude subir porque no estuve en casa, y siendo el día internacional laliter tenía que haber subido, así que subo hoy :)